lunes, 29 de septiembre de 2008

Comparsa Huara (2007, Chile Profundo)



Comparsa Huara

El vereda capital
(2007, Chile Profundo)

Jordi Berenguer

Aquellos que fueron testigos de los años ochenta en Chile, que no sólo tienen recuerdos de la irrupción de algunas bandas de rock y pop y que escaparon al espacio y a la estética que cubría el llamado Canto Nuevo, pueden recordar una agrupación que marcada fuertemente por los sones del norte del territorio hizo su aparición en el horizonte musical: Huara. Grupo que tenía como base (y aún tiene si consideramos los años y los cambios de nombre) a los hermanos Claudio y Francisco Araya, siendo el primero aquel que ha jugado un rol más protagónico en la mantención del nombre y del trabajo creativo de este grupo.

Los mismos que recuerdan el nombre quizás tendrán en su memoria los discos de aquellos años, Huara (1982), Viene el chaparrón (1988) y Cafuzo (1989). Los tres son trabajos que, de manera similar a la experimentación que grupos como Fulano y Santiago del Nuevo Extremo hacían en sus últimos años y que Congreso venía armando hace algún tiempo, escapaban al formato tradicional y, en el caso de Huara, al molde de la música del norte grande. El propio Claudio "Pajarito" Araya ha confesado que se sentían solos en su búsqueda creativa y no ajenos a la incomprensión.

A los mismos ya aludidos y ahora quizás a algunos otros pueden sonar a puro recuerdo o pura memoria estas palabras, pero tienen que ver con el nuevo trabajo de Huara –ahora Comparsa Huara–, o más bien de Pajarito Araya. Ya había presentado su disco El fulgor (2003) y algunas de sus influencias quedaron en su fugaz paso por Congreso, principalmente en el disco La loca sin zapatos (2001), es este trabajo actual el que recoge y condensa la labor del grupo.

Es posible encontrar en esta versión 2007 de Huara la misma riqueza y amplitud de sonidos que ofrecían a finales de los ochentas interpretando temas como “La banda del litrho”, creación que es retomada en el nuevo disco. Lo mismo ocurre con temas que Araya ya había planteado en su trabajo anterior y que vuelve a desarrollar, como "El paletó de Santiago". O la libertad que se permite al rescatar la música del tema "Arte de un pájaro", del mencionado disco de Congreso, y al jugar desde la frase "vereda capital" para crear una nueva canción y cerrar su actual disco.

Pero este trabajo no se queda sólo en eso. Nos pasea en cinco movimientos por toda la riqueza sonora del norte, acompañado de excelentes músicos (el percusionista Raúl Aliaga, el cantante Mario Rojas, la Banda Wiracocha entre otros) y con letras y sonidos que evocan la alegría, la nostalgia, la soledad, las vivencias, dolores y sentimientos de este "pájaro errante" que, avecindado en Santiago, no ha perdido su esencia original. Y que además permite conocer las voces de miles años de historia que aún se oyen en el norte de Chile y se reúnen en un disco bien anunciado en un verso del tema "Fragmento de una solitaria": vengo otra vez, para crecer, para encontrar lo que perdí.

miércoles, 23 de abril de 2008

Comparsa en Huara


Con mucha satisfacción recibí un valioso presente de mi amigo Bernardo Guerrero.

Se trata ni más ni menos de la última producción del músico antofagastino y fundador del grupo Huara, Claudio "Pájaro" Araya, quien rinde un renovado homenaje al norte grande con "Comparsa de Huara", editado por el sello Chile Profundo.

Esta nueva obra musical de Araya, recrea con mucha autenticidad y originalidad, la ancestral
rogativa a la Pachamama y extiende, con una multiplicidad de colores, la revaloración a muchos rituales y festividades que representan nuestra tierra nortina.



Esta creación se adscribe a la corriente musical denominada Fusión, la que combina elementos tradicionales, con una banda muy iquiqueña como Wiracocha y los aires externos de la música electrónica y del jazz. Es a partir de su propuesta dinámica y vanguardista que el músico crea, experimenta y desarrolla sus ideas artísticas y es esa misma fuerza la que lo lleva a entregar un sello distintivo de hacer música para su cultura.

Por supuesto que el estilo ya es ampliamente conocido por la incursión que han hecho numerosos grupos y solistas latinoamericanos. Sin embargo, hay que reconocer que siempre en estas combinaciones musicales se corre el riesgo de perder la raigambre. Para fortuna de quienes amamos la cultura nortina esto no ocurre; por el contrario, esta conciliación de sonidos ancestrales y modernos reflejan con mayor fuerza la esencia cosmopolita de la cultura nortina.

Claudio Araya, logra crear una verdadera amalgama de sonidos y contenidos, demostrando que el folclore nos es algo estático. Es más, me atrevería a decir que incluso logra sintetizar dos elementos que a veces en las grabaciones escuchamos por separados: el baile y la exigencia auditiva. Es decir podemos escuchar la música y al mismo tiempo dejarnos llevar por las fugas de baile, claramente marcadas por la banda, o los quiebres rítmicos incrustados en cada composición.

Por lo demás, a partir de los temas telúricos de la zona "Pájaro" Araya nos lleva a reflexionar sobre algunos temas eternos del ser humano: el amor, la vida, la soledad y las veredas de la nostalgia. El disco se inicia con "Saludos a la Virgen" que se entremezclan con las voces antiguas y luego se van incorporando en los demás track los sonidos de las quenas, quenachos, zampoñas, guitarras, tipe, charango, complementados con panderos, cajas, viola, violoncello y violín. Al llegar al tema "Hotel Pekín" , sentimos que el espacio se amplia para la experimentación musical.

Comparsa de Huara, es una invención que nace de un artista con influencia académica, pero que no se despoja de los sentimientos y vivencias que conforman la cultura prehispánica y urbana. Naturalmente es una nueva estética muy válida en los tiempos modernos, que permite expresar aspectos sustanciales de la convivencia del hombre con su entorno social y cultural.


Otro aporte del CD es el tema "Fragmento de una solitaria". El músico nos dice: "Más que un país de la niñez, vengo otra vez para crecer. Para encontrar lo que perdí". La letra simboliza uno de los misterios que surge en la intimidad de todo emigrante: la dura nostalgia por el terruño, la familia, la casa, la amada, los amigos y todo aquello que representa nuestra memoria. Entonces, en esa atmósfera cargada de sentimientos encontrados, brota el acordeón melancólico que nos emborracha con su sonido tan porteño y profundo.

Con toda certidumbre, este es un proyecto musical que renueva el compromiso emotivo de su autor con la tierra que lo vio nacer y que a nosotros - como receptores - nos provoca una estimulante sintonía con una composición armoniosamente transgresora del pasado tradicional.

Iván Vera Pinto
Director de Extensión UNAP

viernes, 11 de enero de 2008

Comparsa Huara - El desierto que canta


Disco "Comparsa Huara", de Claudio "Pájaro" Araya, El desierto que canta.


El músico antofagastino fundador del grupo Huara, Claudio "Pájaro" Araya rinde homenaje al norte grande con "Comparsa Huara". Una nueva entrega del sello Chile Profundo.



Según cuenta el mito fundacional del mundo andino, el dios Wiraqocha, creador del cielo y de la tierra, tras ser ofendido por los hombres, salió del lago Titicaca para destruir a la humanidad originaria, convirtiéndola en piedra. Las estatuas encontradas en Tiawanaco son los "modelos" de los nuevos hombres y mujeres que "Wiraqocha hizo salir del subsuelo (de ríos, manantiales, cerros, árboles) en las cuatro direcciones del espacio", antes de retirarse al Cuzco. Junto a la humanidad, Wiraqocha creó la luz, haciendo subir al cielo al sol y a la luna. Y también creó la música, que llenó el desierto y los oasis con sonidos extraidos de la propia naturaleza: el viento, las aguas, los animales.
Es esta creación la que Araya, reedita a través de la música, que nace como un ruego de la Pachamama y se proyecta en un registro amplio y diverso como el propio norte grande, que expresa tanto su fuerza, como su festividad y su dolor histórico."En este disco encontramos la fuerza y la angustia de un norte grande que se transfigura en miles de sonidos. Las voces de los diez mil años de historia terminan registrados en esta obra. Voces que trasuntan sangres de otras culturas que junto a la aymara crearon una nueva, cuyo adn es imposible de deletrear.

Un norte grande que se expande por el mundo, por lo mismo que su partida de nacimiento no reconoce fronteras. Un territorio que viaja en la maleta de la diáspora ya sea en Santiago, Amsterdam o Estambul. Un paisaje que siempre vuelve", escribe en la presentación el sociólogo, académico de la Universidad Arturo Prat y estudioso de la cultura nortina, Bernardo Guerrero.Inaugurado con Saludos a la virgen, provenientes del folclor de La Tirana, el disco, que también refleja el desplazamiento inevitable del nortino a la capital, con tracks que dan cuenta de su desarraigo y su inserción en el ámbito urbano, incluye, junto a los temas del "Pájaro", a quien pertenecen la dirección musical y los arreglos, una canción de Mario Rojas, productor musical del álbum; una del ingeniero de sonido, Jorge Abarca, y otras en coautoría de Araya con su hermano Francisco, con Rojas y con Fernando Torres. El disco cuenta con la participación de destacados músicos como el percusionista Raúl Aliaga, entre otros, y la Banda Wiraqocha de Iquique.Quenas, quenachos, zampoñas, guitarras, tipe, charango, se complementan con panderos, cajas, viola, violencello y violín en esta nueva apuesta del sello Chile Profundo, liderado por Cecilia García-Huidobro, haciendo oír, desde las raíces, el canto de nuestra identidad.


Disco "Comparsa Huara", de Claudio "Pájaro" Araya

1er Movimiento

1- Saludos a la Virgen (folclor de la Tirana, arreglo: Huara) voces antiguas (Claudio Araya) 03:52
2- Pa' l norte, cofradías (Claudio Araya) 03:06
3- La banda Wiracocha, saltos (D. R.) 01:31
4- La banda del litrho (Claudio Araya, Francisco Araya) 03:34



2do. Movimiento

5- Sambo Wiracocha (D. R.) 01:58
6- Sambodelcarambayzamba (Claudio Araya) 02:29
7- El incendio (Claudio Araya , Francisco Araya) voces antiguas (Claudio Araya) 01:25
8- El paleto de Santiago (Claudio Araya, Fernando Torres) 05:30


3er. Movimiento

9- La memoria (Claudio Araya, Francisco Araya) 01:24
10- Voy en la comparsa (Claudio Araya) 02:18
11- El asalto (Claudio Araya, Francisco Araya) 01:23


4to. Movimiento

12- Hotel Pekin (Claudio Araya, Mario Rojas) 03:23
13- Ventisca (Claudio Araya) 02:05
14- Fragmento de una solitaria (Claudio Araya, Mario Rojas)voces antiguas (Claudio Araya) 04:43
15- Victoria Jara (Claudio Araya)La Ciudad de Iquique (Jorge Abarca) 04:40

5to. Movimiento

16- El verda capital (Claudio Araya, Jorge Abarca, Francisco Araya) 04:4



Créditos


- Claudio "Pajarito" Araya: vocal líder, guitarras, tiple, charango, percusiones, moxeño.
- Francisco Araya: vocal líder, quenacho, quena, zampoñas.
- Raúl Aliaga: caja con plumillas en "Fragmentos de una solitaria", teclado en "Saludo a la Virgen", pandero en "Victoria Jara".
- Claudio Araya Torrico: bajo eléctrico en "Hotel Pekín", "El Vereda Capital".
- Bárbara Lira: coros en "Hotel Pekín", "El Incendio". "Sambodelcarambayzamba".
- José Luis Araya: teclados en "Hotel Pekín".
- Mario Rojas: voz en "Hotel Pekín", palmas en "Victoria Jara".
- Jaime Vásquez: dirección cuarteto de cuerdas en Paletó de Santiago.
- Mabel Muñoz (viola), Gisella (viloncelo).
- Darío Jaramillo (violín).- Jorge Marambio (violín).
- Jorge Abarca: Ingeniero de sonido, responsable de grabación en terreno y en estudio, mezclas, masterización y construcción de secuencias.
- Banda Wiracocha de Iquique, participa en los temas 3, 7, 12. ( Pa'l norte, cofradías, Sambodelcarambayzamba, La memoria).
- Dirección musical y arreglos Claudio Araya Correa.
- Productor musical: Mario Rojas.
- Productora ejecutiva: Cecilia García Huidobro.
- Ilustración carátula: Guillermo Lorca García.
- Fotografías nortinas: Alexis Díaz.
- Dirección de arte: Brandi.

viernes, 4 de enero de 2008

Ahora escuchen al norte


Las planicies nortinas se transmutan en su folclore en sonidos infinitos. O quizás sea que aquella diversidad, rara vez reconocida por el Centro y Sur del país, porfíe en hacerse notar a través de su música. No sabemos de dónde provienen ni a dónde van las voces y timbres que se escuchan en el disco Comparsa Huara, pero su espíritu es, inequívocamente, el del Norte Grande. La elocuencia de esta mezcla de raigambre andina —aquella música que, a falta de tierra firme, “se arriaga en el viento”, según leímos alguna vez— es la de una fotografía ancha y bien definida, que no deja lugar a dudas sobre el carácter del paisaje que muestra. Se trata, además, del muy bienvenido regreso de Claudio Pájaro Araya al trabajo discográfico, en el que sus experiencias de los años ‘80 junto al grupo Huara se recuerdan como de los más valiosos esfuerzos por ampliar los referentes de la música joven chilena de la época. También colaborador de Congreso, Araya es considerado uno de los más talentosos arregladores instrumentales en el ámbito de la investigación folclórica.Su causa y afecto siempre serán los de su tierra, Antofagasta.

Araya ha levantado en Comparsa Huara un monumento a los sonidos del Norte Grande que bien puede servir como introducción poderosa al misterio de ese folclore. Está, como no, el saludo de percusiones a la Virgen de La Tirana, pero también —y en un cruce de credos al que tan bien nos haría acostumbrarnos— los debidos respetos al dios Wiraqocha, salido (según el mito andino) del lago Titicaca para suplantar la humanidad originaria con hombres y mujeres nuevos, beneficiarios de lo mejor de su creación: el sol, la luna, la música de la naturaleza. Ordenado en cinco movimientos, el disco se presenta como el trayecto físico y espiritual —a veces instrumental y a veces cantado— de un nortino en Santiago; acaso el del propio y errante Pájaro Araya, aquí identificable en los versos de irremediable añoranza de quien advierte: “Envolveré todos mis llantos / y volveré a mi salar”.La disposición amplia de instrumentos poco habituales para el auditor convencional (tiples, moxeño, quenacho, zampoñas), y la colaboración de gente como Raúl Aliaga o Mario Rojas son parte de la misma convocatoria inclusiva de un disco de folclore que invita más desde la celebración que la ortodoxia, y que enseña un rostro de chilenidad injustamente ausente de nuestra perspectiva.

(http://marisolgarcia.blogspot.com/2007/05/ahora-escuchen-al-norte.html)